Noguera NOG 016_Vilanova de Meià
Espai Natural Protegit de la Serra del Montsec. Montsec de Rúbies. Cinglo de la Cabroa. Puig de Meià
Vilanova de Meià – Sant Sebastià – Coll de la Cabana d’en Pere – Meià – Vilanova de Meià
Mapes Comarcals de Catalunya. La Noguera. 1:50.000. Institut Cartogràfic de Catalunya (ICC).
Resumen
Distancia:22 km
Desnivel:780 m
Tiempo:2 h 30 min
Dificultad:media
El pueblo antiguo de Meià
Un viaje a los orígenes históricos del poblamiento de la Coma de Meià, concretamente en el antiguo poblado al abrigo del antiguo castillo de Meià ubicado a los pies de los riscos del poderoso Montsec de Rúbies y encima de una colina desde la que se domina toda la cuenca. Intensa en paisaje y muy gratificante para el alma.
Salimos de Vilanova de Meià en dirección a Santa Maria de Meià. Por una pista nos adentramos de lleno en la Coma de ... El pueblo antiguo de Meià
Un viaje a los orígenes históricos del poblamiento de la Coma de Meià, concretamente en el antiguo poblado al abrigo del antiguo castillo de Meià ubicado a los pies de los riscos del poderoso Montsec de Rúbies y encima de una colina desde la que se domina toda la cuenca. Intensa en paisaje y muy gratificante para el alma.
Salimos de Vilanova de Meià en dirección a Santa Maria de Meià. Por una pista nos adentramos de lleno en la Coma de Meia, vestida de cultivos en toda su extensión, una plana enmarcada entre el Montsec de Rúbies, la Sierra de Sant Mamet y el desagüe del río Boix en su curso hacia el Segre. Una cuenca muy rica en fósiles como se puede comprobar al final de la ruta en un callejón junto a la iglesia, donde hay jardineras construidas con estos materiales provenientes de un antiguo mar que bañaba estas tierras en tiempos muy lejanos
Llegamos a Santa Maria de Meià, una población que aún hoy es la capital espiritual de la Coma de Meià como lo fue durante 800 años del Priorato de Meià. Continuamos por el Camino del Coll de Orenga (que conduce al despoblado de Peralba y Fontllonga) para dejarlo más adelante por el Camí de la Cabroa, iniciando una larga subida de tramos empinadas que busca el punto débil del risco, el aéreo y impresionante estrecho del mismo nombre. Al poco de iniciar la subida pasamos por la ermita de Sant Sebastià, un buen lugar para descansar y contemplar el paisaje que se despliega a nuestros pies. El paso del estrecho de Cabroa para alcanzar la meseta que se extiende a los pies de las molas pétreas que coronan el Montsec de Rúbies, es apasionante.
Llegamos al collado donde está la Cabana d’en Pere. Dejamos a la izquierda el camino del despoblado de Rúbies. Pedaleamos hacia levante bajo la atenta mirada de los riscos, tan cercanos que parecen precipitarse sobre nosotros. A lo largo del espacio que queda, que no es mucho, entre los riscos de la parte alta y los que se elevan desde la coma, se multiplican los cultivos de encinas truferas, un recurso sugerente para la economía de la zona. Perdemos altura rápidamente disfrutando en todo momento del abrupto paisaje que nos rodea, llenando de energía y vitalidad el cuerpo y el alma.
Nos desviamos, evitando caer al fondo del valle, en dirección a la ermita Virgen del Puig de Meià. Desde el Coll de Meià, intersección de la ruta para iniciar el descenso a Vilanova, accedemos al Puig de Meià, un pequeño llano donde estaba el antiguo pueblo de Meià, origen histórico del poblamiento de la Coma. Villa y Castillo fueron arrasados por el conde Mateu de Foix, lo que ocasionó que la población se trasladara a la Villa Nueva de Meià (al pie del monte) y abandonara la villa vieja. En muchos lugares del llano quedan vestigios de las casas de la antigua población y aún se conservan una parte de los muros de ca la Carlania, del castillo (siglos X y XI), de lienzos de muralla y de algunas torres que la defendían. Estas edificaciones tenían su origen en un poblado ibérico, que se romanitzar cogiendo el nombre de su propietario (Medius), que luego sirvió para dar nombre al cerro, en la antigua villa y castillo ya todos los pueblos y términos de la como que dependían de él.
Lo primero que encontramos llegando al plan raíz de risco son los restos del antiguo castillo. Unos metros más allá está la ermita, también conocida como Sant Cristòfol del Puig de Meià, desde la que se divisa un extenso paisaje de la Coma de Meià y los relieves que la rodean. Esta iglesia es románica (siglo XI) con vestigios de los siglos IX y X y ha sido recientemente restaurada por la parte exterior y la antigua casa del ermitaño, ha sido reconvertida en refugio de montaña.
Volvemos al collado, bien deshaciendo el camino o por un sendero que empieza detrás de la ermita, no siempre claro. En el collado sale el antiguo camino que subía desde Vilanova, camino que seguimos para finalizar la ruta. Si no te gustan las trialeras, se puede deshacer el camino hasta la pista principal, que baja directamente a la carretera que lleva a Vilanova de Meià.
Abril de 2018
CENTROS DE INTERÉS
Monasterio de Santa Maria de Meià. San Sebastián. Castillo de Meià. Virgen del Puig de Meià
RESTAURANTES / ALOJAMIENTOS
http://www.vilanovademeia.org/
Un viaje a los orígenes históricos del poblamiento de la Coma de Meià, concretamente en el antiguo poblado al abrigo del antiguo castillo de Meià ubicado a los pies de los riscos del poderoso Montsec de Rúbies y encima de una colina desde la que se domina toda la cuenca. Intensa en paisaje y muy gratificante para el alma.
Salimos de Vilanova de Meià en dirección a Santa Maria de Meià. Por una pista nos adentramos de lleno en la Coma de ... El pueblo antiguo de Meià
Un viaje a los orígenes históricos del poblamiento de la Coma de Meià, concretamente en el antiguo poblado al abrigo del antiguo castillo de Meià ubicado a los pies de los riscos del poderoso Montsec de Rúbies y encima de una colina desde la que se domina toda la cuenca. Intensa en paisaje y muy gratificante para el alma.
Salimos de Vilanova de Meià en dirección a Santa Maria de Meià. Por una pista nos adentramos de lleno en la Coma de Meia, vestida de cultivos en toda su extensión, una plana enmarcada entre el Montsec de Rúbies, la Sierra de Sant Mamet y el desagüe del río Boix en su curso hacia el Segre. Una cuenca muy rica en fósiles como se puede comprobar al final de la ruta en un callejón junto a la iglesia, donde hay jardineras construidas con estos materiales provenientes de un antiguo mar que bañaba estas tierras en tiempos muy lejanos
Llegamos a Santa Maria de Meià, una población que aún hoy es la capital espiritual de la Coma de Meià como lo fue durante 800 años del Priorato de Meià. Continuamos por el Camino del Coll de Orenga (que conduce al despoblado de Peralba y Fontllonga) para dejarlo más adelante por el Camí de la Cabroa, iniciando una larga subida de tramos empinadas que busca el punto débil del risco, el aéreo y impresionante estrecho del mismo nombre. Al poco de iniciar la subida pasamos por la ermita de Sant Sebastià, un buen lugar para descansar y contemplar el paisaje que se despliega a nuestros pies. El paso del estrecho de Cabroa para alcanzar la meseta que se extiende a los pies de las molas pétreas que coronan el Montsec de Rúbies, es apasionante.
Llegamos al collado donde está la Cabana d’en Pere. Dejamos a la izquierda el camino del despoblado de Rúbies. Pedaleamos hacia levante bajo la atenta mirada de los riscos, tan cercanos que parecen precipitarse sobre nosotros. A lo largo del espacio que queda, que no es mucho, entre los riscos de la parte alta y los que se elevan desde la coma, se multiplican los cultivos de encinas truferas, un recurso sugerente para la economía de la zona. Perdemos altura rápidamente disfrutando en todo momento del abrupto paisaje que nos rodea, llenando de energía y vitalidad el cuerpo y el alma.
Nos desviamos, evitando caer al fondo del valle, en dirección a la ermita Virgen del Puig de Meià. Desde el Coll de Meià, intersección de la ruta para iniciar el descenso a Vilanova, accedemos al Puig de Meià, un pequeño llano donde estaba el antiguo pueblo de Meià, origen histórico del poblamiento de la Coma. Villa y Castillo fueron arrasados por el conde Mateu de Foix, lo que ocasionó que la población se trasladara a la Villa Nueva de Meià (al pie del monte) y abandonara la villa vieja. En muchos lugares del llano quedan vestigios de las casas de la antigua población y aún se conservan una parte de los muros de ca la Carlania, del castillo (siglos X y XI), de lienzos de muralla y de algunas torres que la defendían. Estas edificaciones tenían su origen en un poblado ibérico, que se romanitzar cogiendo el nombre de su propietario (Medius), que luego sirvió para dar nombre al cerro, en la antigua villa y castillo ya todos los pueblos y términos de la como que dependían de él.
Lo primero que encontramos llegando al plan raíz de risco son los restos del antiguo castillo. Unos metros más allá está la ermita, también conocida como Sant Cristòfol del Puig de Meià, desde la que se divisa un extenso paisaje de la Coma de Meià y los relieves que la rodean. Esta iglesia es románica (siglo XI) con vestigios de los siglos IX y X y ha sido recientemente restaurada por la parte exterior y la antigua casa del ermitaño, ha sido reconvertida en refugio de montaña.
Volvemos al collado, bien deshaciendo el camino o por un sendero que empieza detrás de la ermita, no siempre claro. En el collado sale el antiguo camino que subía desde Vilanova, camino que seguimos para finalizar la ruta. Si no te gustan las trialeras, se puede deshacer el camino hasta la pista principal, que baja directamente a la carretera que lleva a Vilanova de Meià.
Abril de 2018
CENTROS DE INTERÉS
Monasterio de Santa Maria de Meià. San Sebastián. Castillo de Meià. Virgen del Puig de Meià
RESTAURANTES / ALOJAMIENTOS
http://www.vilanovademeia.org/