Maresme MAR 009_Sant Pol de Mar
Parc del Montnegre i el Corredor. El Montnegre
Sant Pol de Mar — Coll de l’Era d’en Mora — Collet de Sant Andreu — Turó Gros — Coll de Basses — Cal Paraire — Coll Senís — Sant Iscle de Vallalta — Canet de Mar — Sant Pol de Mar
Mapa digital Comarcal. Maresme 1:50.000. Institut Cartogràfic de Catalunya (ICC).
http://srv.icgc.cat/vissir3/
Resumen
Distancia:42 km
Desnivel:1500 m
Tiempo:4 h 15 min
Dificultad:difícil
Información
Turó Gros, la cima del Montnegre
Ruta que recorre el corazón del Montnegre para alcanzar una de sus cimas, el Turó Gros, considerada el techo comarcal del Maresme con permiso del Turó d'en Vives, de altura prácticamente similar. El trayecto hasta la cima, una explanada con una torre de vigilancia contra incendios, es un viaje a la idiosincrasia del macizo, una montaña abrupta, salvaje y a veces impenetrable que huele a mediterráneo y está cubierta de bosques exuberantes donde p... Turó Gros, la cima del Montnegre
Ruta que recorre el corazón del Montnegre para alcanzar una de sus cimas, el Turó Gros, considerada el techo comarcal del Maresme con permiso del Turó d'en Vives, de altura prácticamente similar. El trayecto hasta la cima, una explanada con una torre de vigilancia contra incendios, es un viaje a la idiosincrasia del macizo, una montaña abrupta, salvaje y a veces impenetrable que huele a mediterráneo y está cubierta de bosques exuberantes donde predominan la encina, el alcornoque y el pino piñonero, y en las partes altas, destacan, por su interés científico y paisajístico, los robledales de roble africano y de roble de hoja grande
En Sant Pol de Mar marchamos calles arriba hacia el Club de Tenis, punto donde empieza la buena pista que se adentra por el valle de Golinons, un bonito y estrecho valle que nos recibe con huertos, palmeras, plataneros y encinas, estas ya mas acorde con el perfil boscoso del Montnegre. Salimos del pequeño valle entre las colinas de Golinons y el Home Mort disfrutando desde la altura del azul radiante e intenso de la mediterrània.
Bajada hasta la explanada del collado de la Era d'en Mora donde enlazamos con la carretera de Hortasavinyà que seguimos, primero por asfalto y más tarde por pista, hasta el collado de Sant Andreu, lugar nos desviamos para visitar la ermita homónima de origen románico (s. XI o XII).
Continuamos hasta cerca de la Creu dels Tres Termes, punto donde dejamos la pista principal y nos desviamos bajando hacia el Sot d'en Terrades. Nos movemos por un valle solitario y salvaje que exuda la esencia del macizo y nos lleva a las cercanías de Hortasavinyà. Continuamos por una buena pista hasta el collado de Sant Benet Vives, punto de paso obligado para los caminantes y ciclistas que se adentran en el parque y un centro que acoge actividades relacionadas con el desarrollo armónico del ser humano, el cultivo del mundo interno de las personas y la práctica de una espiritualidad no confesional.
Continuamos de llano en dirección a Sant Martí del Montnegre por la umbría de la cima acunados por una densa boscuria que nos llena de energía positiva para afrontar la subida hacia el Turó Gros, el objetivo del día. Nos desviamos por una pista a la izquierda que sube a Santa Maria de Montnegre rodeados de castaños que lucen el mejor verde posible bajo la luz solar que parece traspasarlos. La pequeña aldea de Sant Maria de Montnegre había sido centro de la baronía del Montnegre. Al lado de la capilla estaba el roble monumental de Santa María de tronco grueso y ramaje denso y alto, desgraciadament, un fuerte viento lo hizo caer dejando al descubierto un tronco medio vacío por pudrición. Los Amigos de Santa María del Montnegre han logrado que el Roure renazca mediante clonación.
Acabamos de subir a la cresta y la recorremos hasta el Turó Gros. El camino transita por fantásticos bosques de roble africano y de roble de hoja grande. Pedaleamos entre árboles alterosos de troncos alargados y esbeltos rematados por copas de verde primaveral y sotobosque inmaculado con la sensación de que la magia y la energía que desprende el lugar se apodera totalmente del visitante.
La densa vegetación que envuelve el Turó Gros nos esconde las vistas que normalmente ofrecen las cimas. Ahora bien, si tiene la suerte de poder acceder a la torre de vigilancia, las panorámicas del territorio que se divisan son generosas y espectaculares. La altura que nos proporciona la torre por encima de la cubierta arbórea nos regala unas espléndidas panorámicas de 360º que llegan desde el puerto de Barcelona y Montjuic, pasando por el corredor vallesano y el Montseny hasta Cap de Creus. Espectacular.
Continuamos la ruta hipnotizados por la belleza boscana que nos rodea hasta Coll de Basses donde pasamos a la cara solana. Tenemos una bajada entretenida por las fuertes pendientes y la rocalla hasta Cal Paraire. A partir de esta finca el descenso mejora considerablemente y llegamos con celeridad, excepto un tramo final opcional por sendero, a Sant Iscle de Vallalta. Continuamos un corto tramo por carretera en paralelo a la riera de Vallalta hasta encontrar la pista que nos sube al Mirador de la Cruz de Canet, ubicada en los contrafuertes más meridionales de la sierra del Montnegre y el Corredor disfrutando de una buena perspectiva que abarca desde Canet hasta Sant Pol con el mar de trasfondo.
La primera Cruz de Canet fue construida en 1901, cuando el papa León XIII pidió a los pueblos que levantaran cruces conmemorando la entrada al nuevo siglo. Lluís Domènech i Montaner, fue su arquitecto y en 1926, un fuerte viento lo hizo caer. La segunda Cruz fue una copia de la primera. Proyectada por Pere Domènech Roura hijo del anterior. También cayó al inicio de la Guerra Civil en 1936. Durante los años 40 se colocó una cruz de madera. Después, realizando una recaudación de fondos hasta 1954 que se encargó un nuevo proyecto, al arquitecto Isidre Puig Boada.
Bajamos por una buena pista hasta las afueras de Canet donde encontramos el camino de Canet a Sant Cebrià de Vallalta. Lo dejamos a la altura de Bellavista y Bellaguarda por un camino que nos baja hasta el Farrell, punto donde marchamos hacia el final de la ruta, Sant Pol de Mar
Abril de 2024
CENTROS DE INTERÉS
Sant Andreu. Santa Maria de Montnegre. La Salut de Sant Iscle de Vallalta. La Creu de Canet.
ALOJAMIENTOS / RESTAURANTES
https://www.santpol.cat/turisme
Ruta que recorre el corazón del Montnegre para alcanzar una de sus cimas, el Turó Gros, considerada el techo comarcal del Maresme con permiso del Turó d'en Vives, de altura prácticamente similar. El trayecto hasta la cima, una explanada con una torre de vigilancia contra incendios, es un viaje a la idiosincrasia del macizo, una montaña abrupta, salvaje y a veces impenetrable que huele a mediterráneo y está cubierta de bosques exuberantes donde p... Turó Gros, la cima del Montnegre
Ruta que recorre el corazón del Montnegre para alcanzar una de sus cimas, el Turó Gros, considerada el techo comarcal del Maresme con permiso del Turó d'en Vives, de altura prácticamente similar. El trayecto hasta la cima, una explanada con una torre de vigilancia contra incendios, es un viaje a la idiosincrasia del macizo, una montaña abrupta, salvaje y a veces impenetrable que huele a mediterráneo y está cubierta de bosques exuberantes donde predominan la encina, el alcornoque y el pino piñonero, y en las partes altas, destacan, por su interés científico y paisajístico, los robledales de roble africano y de roble de hoja grande
En Sant Pol de Mar marchamos calles arriba hacia el Club de Tenis, punto donde empieza la buena pista que se adentra por el valle de Golinons, un bonito y estrecho valle que nos recibe con huertos, palmeras, plataneros y encinas, estas ya mas acorde con el perfil boscoso del Montnegre. Salimos del pequeño valle entre las colinas de Golinons y el Home Mort disfrutando desde la altura del azul radiante e intenso de la mediterrània.
Bajada hasta la explanada del collado de la Era d'en Mora donde enlazamos con la carretera de Hortasavinyà que seguimos, primero por asfalto y más tarde por pista, hasta el collado de Sant Andreu, lugar nos desviamos para visitar la ermita homónima de origen románico (s. XI o XII).
Continuamos hasta cerca de la Creu dels Tres Termes, punto donde dejamos la pista principal y nos desviamos bajando hacia el Sot d'en Terrades. Nos movemos por un valle solitario y salvaje que exuda la esencia del macizo y nos lleva a las cercanías de Hortasavinyà. Continuamos por una buena pista hasta el collado de Sant Benet Vives, punto de paso obligado para los caminantes y ciclistas que se adentran en el parque y un centro que acoge actividades relacionadas con el desarrollo armónico del ser humano, el cultivo del mundo interno de las personas y la práctica de una espiritualidad no confesional.
Continuamos de llano en dirección a Sant Martí del Montnegre por la umbría de la cima acunados por una densa boscuria que nos llena de energía positiva para afrontar la subida hacia el Turó Gros, el objetivo del día. Nos desviamos por una pista a la izquierda que sube a Santa Maria de Montnegre rodeados de castaños que lucen el mejor verde posible bajo la luz solar que parece traspasarlos. La pequeña aldea de Sant Maria de Montnegre había sido centro de la baronía del Montnegre. Al lado de la capilla estaba el roble monumental de Santa María de tronco grueso y ramaje denso y alto, desgraciadament, un fuerte viento lo hizo caer dejando al descubierto un tronco medio vacío por pudrición. Los Amigos de Santa María del Montnegre han logrado que el Roure renazca mediante clonación.
Acabamos de subir a la cresta y la recorremos hasta el Turó Gros. El camino transita por fantásticos bosques de roble africano y de roble de hoja grande. Pedaleamos entre árboles alterosos de troncos alargados y esbeltos rematados por copas de verde primaveral y sotobosque inmaculado con la sensación de que la magia y la energía que desprende el lugar se apodera totalmente del visitante.
La densa vegetación que envuelve el Turó Gros nos esconde las vistas que normalmente ofrecen las cimas. Ahora bien, si tiene la suerte de poder acceder a la torre de vigilancia, las panorámicas del territorio que se divisan son generosas y espectaculares. La altura que nos proporciona la torre por encima de la cubierta arbórea nos regala unas espléndidas panorámicas de 360º que llegan desde el puerto de Barcelona y Montjuic, pasando por el corredor vallesano y el Montseny hasta Cap de Creus. Espectacular.
Continuamos la ruta hipnotizados por la belleza boscana que nos rodea hasta Coll de Basses donde pasamos a la cara solana. Tenemos una bajada entretenida por las fuertes pendientes y la rocalla hasta Cal Paraire. A partir de esta finca el descenso mejora considerablemente y llegamos con celeridad, excepto un tramo final opcional por sendero, a Sant Iscle de Vallalta. Continuamos un corto tramo por carretera en paralelo a la riera de Vallalta hasta encontrar la pista que nos sube al Mirador de la Cruz de Canet, ubicada en los contrafuertes más meridionales de la sierra del Montnegre y el Corredor disfrutando de una buena perspectiva que abarca desde Canet hasta Sant Pol con el mar de trasfondo.
La primera Cruz de Canet fue construida en 1901, cuando el papa León XIII pidió a los pueblos que levantaran cruces conmemorando la entrada al nuevo siglo. Lluís Domènech i Montaner, fue su arquitecto y en 1926, un fuerte viento lo hizo caer. La segunda Cruz fue una copia de la primera. Proyectada por Pere Domènech Roura hijo del anterior. También cayó al inicio de la Guerra Civil en 1936. Durante los años 40 se colocó una cruz de madera. Después, realizando una recaudación de fondos hasta 1954 que se encargó un nuevo proyecto, al arquitecto Isidre Puig Boada.
Bajamos por una buena pista hasta las afueras de Canet donde encontramos el camino de Canet a Sant Cebrià de Vallalta. Lo dejamos a la altura de Bellavista y Bellaguarda por un camino que nos baja hasta el Farrell, punto donde marchamos hacia el final de la ruta, Sant Pol de Mar
Abril de 2024
CENTROS DE INTERÉS
Sant Andreu. Santa Maria de Montnegre. La Salut de Sant Iscle de Vallalta. La Creu de Canet.
ALOJAMIENTOS / RESTAURANTES
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