Urgell URG 004_Guimerà
Plans de Sant Roc. Serra del Tallat. Les Forques. Obagues del Riu Corb_
Guimerà – Santuari de Bovera – Ciutadilla – Rocallaura – Belltall – Forès – Sant Pere de Savella – el Fonoll – Vallfogona de Riucorb – Guimerà
Mapes Comarcals de Catalunya. Urgell. 1:50.000. Institut Cartogràfic de Catalunya (ICC).
Resumen
Distancia:45 km
Desnivel:1090 m
Tiempo:4 h 15 min
Dificultad:media-difícil
Forés, el mirador de la Conca de Barberà
Seguramente Guimerà sea uno de los pueblos más bonitos de Cataluña, un lugar por descubrir y desde donde iniciar una ruta en bicicleta por el entorno. En este caso los objetivos de la ruta son conocer tanto el paisaje típico de las Umbrías del Río Cuervo, como los interesantes núcleos del entorno y llegar hasta Forès, un pueblo otear que es un auténtico mirador sobre la Conca de Barberà.
Desde Guimerà en Ciutadilla podemos... Forés, el mirador de la Conca de Barberà
Seguramente Guimerà sea uno de los pueblos más bonitos de Cataluña, un lugar por descubrir y desde donde iniciar una ruta en bicicleta por el entorno. En este caso los objetivos de la ruta son conocer tanto el paisaje típico de las Umbrías del Río Cuervo, como los interesantes núcleos del entorno y llegar hasta Forès, un pueblo otear que es un auténtico mirador sobre la Conca de Barberà.
Desde Guimerà en Ciutadilla podemos optar por seguir por el margen izquierdo del valle o hacerlo por la parte alta. Esta segunda opción es más estimulante que la hondonada. De entrada ascender por el casco antiguo de marcado sabor medieval ya es una auténtica maravilla: callejones empedrados llenos de encanto, un laberinto de calles estrechas con hermosas arcadas, portales, murallas, ventanales artísticos... que van subiendo de una manera casi poética hacia la iglesia de Santa María y la Torre del antiguo castillo, todo un magnífico descubrimiento y un conjunto monumental interesantísimo.
El segundo motivo para ganar altura es de carácter geográfico ya que nos permite situarnos en una posición privilegiada sobre el territorio, disfrutando tanto del terreno por el que pedalearemos como, si el tiempo lo permite, de la gran llanura cerrada por el Prepirineo fijando la mirada al sur o al norte respectivamente. El último aliciente mientras navegamos en dirección a Ciutadilla, el cual controlamos en todo momento desde la altura por donde nos movemos, es un descubrimiento de excepción como Santa María de la Bovera, un santuario mariano y antiguo monasterio femenino de la orden del Cister.
Desde este cerro hay unas vistas excelentes y Ciuatadilla se ve majestuosa, coronada por la torre y el impresionante edificio de lo que fue el castillo. Des del pueblo nos adentramos por el casco antiguo yendo a buscar esa ubicación, desde la cual descendemos hacia el valle de Boixeró que recoge las aguas que bajan de la cima de Les Forques, cerca del pueblo de Forès.
Pronto dejamos el pueblo atrás. Pedaleamos escondidos entre barracas y campos de cultivo. Vamos ganando altura hasta que alcanzamos la meseta. La única referencia geográfica que tenemos conocida es el sitio de la Bovera que sobresale tímidamente del paisaje que vemos. Navegamos por los Plans de Sant Roc cruzando pequeñas hondonadas por un camino rural asfaltado que nos lleva hasta una clara bifurcación que si tomamos a la izquierda que opcionalmente nos lleva directamente al núcleo de Belltall si no se quiere perder altura para visitar Rocallaura.
Los bancales alrededor del pueblo de Rocallaura están contenidos con magníficas paredes de piedra secano. Desde el núcleo subimos sin esfuerzos hacia Belltall siguiendo la ruta del Císter la que nos llevará hasta el límite de la meseta, justo cuando éste se levanta majestuoso sobre el Plan de la Conca de Barberà.
El trayecto perfilando el relieve que marca la frontera natural de la cuenca, acentuada por la línea que dibujan los molinos de viento instalados a lo largo de la Sierra del Tallat, nos regala unas vistas majestuosas de la llanura y las sierras que la cierran. Afinando la mirada distinguimos claramente al fondo de la depresión la capital, Montblanc, a los pies de las montañas de Prades.
Por un bonito sendero con algún tramo pedregoso, llegamos a Forés. La imagen del casco antiguo, ubicado sobre una colina, una auténtica atalaya desde la que se domina todo el territorio circundante, sorprende agradablemente al viajero. Esto es lo que escriben en la web del núcleo: "Su privilegiada elevación hace de Forès el mirador natural de la Conca, con una espléndida vista de toda la comarca y de buena parte de la vecina Segarra. La sierra de Montserrat parece que se pueda tocar y, si el día es claro y la hora temprana, se puede admirar el Montseny y vislumbrar el mar por el estrecho del collado de Cabra. Situándose en la parte norte del pueblo, la visión de las tierras de Lleida queda enmarcada por los Pirineos hasta allí donde alarga la mirada. Las palabras que describen el ambiente que se respira son serenidad y grandeza. Las calles transpiran historia y paz. En las dovelas de las puertas de muchas casas del casco antiguo se pueden leer fechas de construcción que muestran su antigüedad... "
Iniciamos el retorno pasando por la ermita de origen románico de Sant Pere de Sabella que se alza al abrigo del pequeño núcleo, ahora deshabitado, de Sabella de la abadía, dominando el valle de Fonoll. Continuamos la ruta por una pista desigual que nos lleva al pueblo de Fonoll convertido en un complejo naturista. Seguimos por la pista que va por el valle del río Seniol que desagua en el río Corb. Para evitar la carretera y llegar a Vallfgona de Riucorb, hacemos un rodeo por el Fondo de Cap de Cans. El pueblo conserva un marcado carácter medieval y también, las ruinas del castillo del tiempo de los templarios de 1190. Uno de los personajes más famosos de la población fue Francisco García y Torres, el rector de Vallfogona entre 1607 hasta el 1623, un singular autor poético de estilo humorístico con el chiste siempre en los labios, tenía relación con poetas de la época como Lope de Vega y con el bandolero Rocaguinarda, al que le dedicó un soneto "el mejor pillard del cristianismo". Su trayectoria fue tan insólita que después de casi cuatro siglos todavía se habla.
Al otro lado del río tomamos el Camino del Colgados. Seguimos por una pista que perfila el margen derecho del río Corb que riega un valle lleno de viñedos. Cuando la pista se acaba continuamos por un bonito tramo de sendero que nos enlaza con una nueva pista que nos lleva de nuevo a Guimerà.
Marzo de 2017
CENTROS DE INTERÉS
Santuario de la Virgen de Bovera. Castillo e iglesia de San Miguel de Ciutadilla. San Miguel de Forès. Ermita de San Pedro de Savella. Casco antiguo y Iglesia de Santa María de Vallfogona de Riucorb. El Rector de Vallfogona
ALOJAMIENTOS / RESTAURANTES
http://www.fores.altanet.org/
Seguramente Guimerà sea uno de los pueblos más bonitos de Cataluña, un lugar por descubrir y desde donde iniciar una ruta en bicicleta por el entorno. En este caso los objetivos de la ruta son conocer tanto el paisaje típico de las Umbrías del Río Cuervo, como los interesantes núcleos del entorno y llegar hasta Forès, un pueblo otear que es un auténtico mirador sobre la Conca de Barberà.
Desde Guimerà en Ciutadilla podemos... Forés, el mirador de la Conca de Barberà
Seguramente Guimerà sea uno de los pueblos más bonitos de Cataluña, un lugar por descubrir y desde donde iniciar una ruta en bicicleta por el entorno. En este caso los objetivos de la ruta son conocer tanto el paisaje típico de las Umbrías del Río Cuervo, como los interesantes núcleos del entorno y llegar hasta Forès, un pueblo otear que es un auténtico mirador sobre la Conca de Barberà.
Desde Guimerà en Ciutadilla podemos optar por seguir por el margen izquierdo del valle o hacerlo por la parte alta. Esta segunda opción es más estimulante que la hondonada. De entrada ascender por el casco antiguo de marcado sabor medieval ya es una auténtica maravilla: callejones empedrados llenos de encanto, un laberinto de calles estrechas con hermosas arcadas, portales, murallas, ventanales artísticos... que van subiendo de una manera casi poética hacia la iglesia de Santa María y la Torre del antiguo castillo, todo un magnífico descubrimiento y un conjunto monumental interesantísimo.
El segundo motivo para ganar altura es de carácter geográfico ya que nos permite situarnos en una posición privilegiada sobre el territorio, disfrutando tanto del terreno por el que pedalearemos como, si el tiempo lo permite, de la gran llanura cerrada por el Prepirineo fijando la mirada al sur o al norte respectivamente. El último aliciente mientras navegamos en dirección a Ciutadilla, el cual controlamos en todo momento desde la altura por donde nos movemos, es un descubrimiento de excepción como Santa María de la Bovera, un santuario mariano y antiguo monasterio femenino de la orden del Cister.
Desde este cerro hay unas vistas excelentes y Ciuatadilla se ve majestuosa, coronada por la torre y el impresionante edificio de lo que fue el castillo. Des del pueblo nos adentramos por el casco antiguo yendo a buscar esa ubicación, desde la cual descendemos hacia el valle de Boixeró que recoge las aguas que bajan de la cima de Les Forques, cerca del pueblo de Forès.
Pronto dejamos el pueblo atrás. Pedaleamos escondidos entre barracas y campos de cultivo. Vamos ganando altura hasta que alcanzamos la meseta. La única referencia geográfica que tenemos conocida es el sitio de la Bovera que sobresale tímidamente del paisaje que vemos. Navegamos por los Plans de Sant Roc cruzando pequeñas hondonadas por un camino rural asfaltado que nos lleva hasta una clara bifurcación que si tomamos a la izquierda que opcionalmente nos lleva directamente al núcleo de Belltall si no se quiere perder altura para visitar Rocallaura.
Los bancales alrededor del pueblo de Rocallaura están contenidos con magníficas paredes de piedra secano. Desde el núcleo subimos sin esfuerzos hacia Belltall siguiendo la ruta del Císter la que nos llevará hasta el límite de la meseta, justo cuando éste se levanta majestuoso sobre el Plan de la Conca de Barberà.
El trayecto perfilando el relieve que marca la frontera natural de la cuenca, acentuada por la línea que dibujan los molinos de viento instalados a lo largo de la Sierra del Tallat, nos regala unas vistas majestuosas de la llanura y las sierras que la cierran. Afinando la mirada distinguimos claramente al fondo de la depresión la capital, Montblanc, a los pies de las montañas de Prades.
Por un bonito sendero con algún tramo pedregoso, llegamos a Forés. La imagen del casco antiguo, ubicado sobre una colina, una auténtica atalaya desde la que se domina todo el territorio circundante, sorprende agradablemente al viajero. Esto es lo que escriben en la web del núcleo: "Su privilegiada elevación hace de Forès el mirador natural de la Conca, con una espléndida vista de toda la comarca y de buena parte de la vecina Segarra. La sierra de Montserrat parece que se pueda tocar y, si el día es claro y la hora temprana, se puede admirar el Montseny y vislumbrar el mar por el estrecho del collado de Cabra. Situándose en la parte norte del pueblo, la visión de las tierras de Lleida queda enmarcada por los Pirineos hasta allí donde alarga la mirada. Las palabras que describen el ambiente que se respira son serenidad y grandeza. Las calles transpiran historia y paz. En las dovelas de las puertas de muchas casas del casco antiguo se pueden leer fechas de construcción que muestran su antigüedad... "
Iniciamos el retorno pasando por la ermita de origen románico de Sant Pere de Sabella que se alza al abrigo del pequeño núcleo, ahora deshabitado, de Sabella de la abadía, dominando el valle de Fonoll. Continuamos la ruta por una pista desigual que nos lleva al pueblo de Fonoll convertido en un complejo naturista. Seguimos por la pista que va por el valle del río Seniol que desagua en el río Corb. Para evitar la carretera y llegar a Vallfgona de Riucorb, hacemos un rodeo por el Fondo de Cap de Cans. El pueblo conserva un marcado carácter medieval y también, las ruinas del castillo del tiempo de los templarios de 1190. Uno de los personajes más famosos de la población fue Francisco García y Torres, el rector de Vallfogona entre 1607 hasta el 1623, un singular autor poético de estilo humorístico con el chiste siempre en los labios, tenía relación con poetas de la época como Lope de Vega y con el bandolero Rocaguinarda, al que le dedicó un soneto "el mejor pillard del cristianismo". Su trayectoria fue tan insólita que después de casi cuatro siglos todavía se habla.
Al otro lado del río tomamos el Camino del Colgados. Seguimos por una pista que perfila el margen derecho del río Corb que riega un valle lleno de viñedos. Cuando la pista se acaba continuamos por un bonito tramo de sendero que nos enlaza con una nueva pista que nos lleva de nuevo a Guimerà.
Marzo de 2017
CENTROS DE INTERÉS
Santuario de la Virgen de Bovera. Castillo e iglesia de San Miguel de Ciutadilla. San Miguel de Forès. Ermita de San Pedro de Savella. Casco antiguo y Iglesia de Santa María de Vallfogona de Riucorb. El Rector de Vallfogona
ALOJAMIENTOS / RESTAURANTES
http://www.fores.altanet.org/