Gironés GIR 012_Canet d’Adri
Espai Natural Protegit de les Muntanyes de Rocacorba. Serrat de la Cadalt. Serrat del Bruguetar. Ri
Canet d’Adri — Foleià — Santuari de Rocacorba — Rocacorba — El Portell — Coll de Valents — Sant Martí de Llemena — Llorà — Jonquerol — Canet d’Adri
Mapes Comarcals de Catalunya. Gironès. 1:50.000. Institut Cartogràfic de Catalunya (ICC)
http://srv.icgc.cat/vissir3/
Resumen
Distancia:41 km
Desnivel:1450 m
Tiempo:4 h 30 min
Dificultad:difícil
Santuario de Rocacorba: las vistas del Empordà
El Espacio Natural Protegido de las Montañas de Rocacorba forma parte de la cordillera Transversal Catalana y se alza entre el valle del Ter, el Pla de Banyoles y el valle de Llémena. Pràcticamente en la parte más alta está el santuario de la Virgen de Rocacorba, construido sobre una gran roca con forma de proa de barco y el objetivo de esta ruta que navega entre relieves abruptos y escarpados, antiguos vecindarios y singulares mas... Santuario de Rocacorba: las vistas del Empordà
El Espacio Natural Protegido de las Montañas de Rocacorba forma parte de la cordillera Transversal Catalana y se alza entre el valle del Ter, el Pla de Banyoles y el valle de Llémena. Pràcticamente en la parte más alta está el santuario de la Virgen de Rocacorba, construido sobre una gran roca con forma de proa de barco y el objetivo de esta ruta que navega entre relieves abruptos y escarpados, antiguos vecindarios y singulares masías en un marco de gran valor paisajístico. Y la guinda final la pone el crater del volcán de Puig de la Banya del Boc en el bellísimo valle de Llémena.
Iniciamos la ruta en la iglesia románica de Sant Vicenç de Canet d'Adri marchando en dirección a la Torre, una majestuosa masía con una antigua torre de defensa, ubicada junto a la Riera de Canet y punto de partida de la ascensión al santuario de Rocacorba. Entramos de lleno en el macizo a partir de Can Nadal. Navegamos por un túnel de vegetación que se abre paso entre la tupida masa forestal de las laderas a levante de la Montaña de Rocacorba, tan densa que a vista de pájaro no se puede seguir la traza entera del camino.
A la altura del Mas Cavaller, una masía con aires señoriales pero descuidada, salimos a espacio abierto, lo que nos permite echar un vistazo a la morfología de la montaña, caracterizada por verticales riscales que sobresalen del bosque que los acoge. En especial, destaca la singular silueta rocosa en forma de proa de barco sobre la que se asienta el santuario y castillo de Rocacorba; y más a la derecha destacan los repetidores de televisión que coronan la cima más alta del macizo, el Puigsou. Atravesamos un pequeño valle agrícola rodeado de pequeñas colinas aparte de los encrespados relieves de Rocacorba pasando por la aldea de Foleià, un conjunto de masías primorosamente restauradas, continuando por una bonita pista que se vuelve a adentrar en el bosque y que pasando por la masía Cadalt, en fase de restauración, nos conecta con la pista que sube, siguiendo la cresta del Serrat de la Cadalt, al ancho collado del Pla de Martí, debajo mismo del Puigsou. El trayecto por debajo de los riscos es muy atractivo, aunque hay rampas fuertes, afortunadamente cimentadas, lo que facilita la progresión. Hasta la cima del Puigsou sube una carretera que debemos dejar antes de llegar para alcanzar el objetivo del día, el santuario y el castillo de Rocacorba.
Rocacorba es una atalaya sobre los altos valles de Biert y Llémena y centinela avanzado del Pla de Girona.
El santuario se construyó en el s. XVIII sobre un antiguo castillo del s. XI, del que todavía son visibles algunos muros. Es del todo imprescindible acercarse hasta un mirador, un camino precioso nos conduce, para disfrutar de las panorámicas del día. Las espectaculares vistas abarcan, entre otros, los relieves pirenaicos en transito hacia el mar – Salinas, Alberes y Cabo de Creus – , la llanura ampurdanesa con el Montgrí y las Islas Medas, las Gavarres, el Montseny, el Far, el Cabrerès , Puigsacalm o los relieves que acompañan al Puigmal. La inmensidad y calma del lugar invita a la meditación y a disfrutar de la amplitud paisajística que se vislumbra desde la cima rocosa para recargar la mente de momentos especialmente positivos.
Volvemos hasta el Pla de Martí y continuamos por una pista que nos desciende a la aldea de Rocacorba formado por un conjunto de masías que parecen abandonadas, aunque hay indicios o intentos de restauración que parece no han tenido éxito, probablemente por el aislamiento del lugar . Continuamos bajando y atravesamos la riera de Rocacorba; un espléndido hayedo nos acompaña mientras nos deslizamos abobados por el fondo del valle antes de remontar hasta el collado del Portell. Remontamos un tramo más, aunque se puede continuar por la pista principal en bajada, y pedaleamos por la cresta del Serrat de Bruguetar continuando por el llano inclinado coronado por el Castellet y que nos baja al bellísimo valle de Llémena.
La ruta continúa río abajo por el margen izquierdo del Llèmena pedaleando encajados entre riscales hasta que encontramos, en Pla de Sant Joan, una buena pista que nos subirá al cráter del Volca del Puig de la Banya del Boc. Al principio de la subida pasamos por una antigua gredera donde se habían extraído los materiales piroclásticos hace algunas décadas antes de la protección del entorno del volcán. En la parte alta mientras atravesamos el antiguo cráter, ahora ocupado por cultivos pero claramente identificable, encontramos un pequeño panel con información geológica muy interesante sobre la erupción. Perdemos altura rápidamente por un camino boscano que nos lleva al vecindario de Llorà, de donde no se puede marchar sin echar un vistazo a la iglesia románica de Sant Pere.
Para acabar la ruta hay que realizar un tramo de carretera hasta encontrar la pista mas allá del pequeño vecindario de Ginestar que nos remonta hasta la aldea de Jonquerol, un conjunto de masías dispersas, desde donde accedemos, hay algunas rampas fuertes, al Collet de Miralles, punto desde donde volvemos en una rápida bajada a Canet d'Adri.
Diciembre de 2023
CENTROS DE INTERÉS
La Torre de Canet d’Adri. Santa Maria de Rocacorba. Castillo de Rocacorba. Sant Martí de Llemena. Volcan de la Banya del Boc. Sant Pere de Llorà.
ALOJAMIENTOS / RESTAURANTES
El Celler de l’Adroher. Telèfon: 972 42 82 70
El Espacio Natural Protegido de las Montañas de Rocacorba forma parte de la cordillera Transversal Catalana y se alza entre el valle del Ter, el Pla de Banyoles y el valle de Llémena. Pràcticamente en la parte más alta está el santuario de la Virgen de Rocacorba, construido sobre una gran roca con forma de proa de barco y el objetivo de esta ruta que navega entre relieves abruptos y escarpados, antiguos vecindarios y singulares mas... Santuario de Rocacorba: las vistas del Empordà
El Espacio Natural Protegido de las Montañas de Rocacorba forma parte de la cordillera Transversal Catalana y se alza entre el valle del Ter, el Pla de Banyoles y el valle de Llémena. Pràcticamente en la parte más alta está el santuario de la Virgen de Rocacorba, construido sobre una gran roca con forma de proa de barco y el objetivo de esta ruta que navega entre relieves abruptos y escarpados, antiguos vecindarios y singulares masías en un marco de gran valor paisajístico. Y la guinda final la pone el crater del volcán de Puig de la Banya del Boc en el bellísimo valle de Llémena.
Iniciamos la ruta en la iglesia románica de Sant Vicenç de Canet d'Adri marchando en dirección a la Torre, una majestuosa masía con una antigua torre de defensa, ubicada junto a la Riera de Canet y punto de partida de la ascensión al santuario de Rocacorba. Entramos de lleno en el macizo a partir de Can Nadal. Navegamos por un túnel de vegetación que se abre paso entre la tupida masa forestal de las laderas a levante de la Montaña de Rocacorba, tan densa que a vista de pájaro no se puede seguir la traza entera del camino.
A la altura del Mas Cavaller, una masía con aires señoriales pero descuidada, salimos a espacio abierto, lo que nos permite echar un vistazo a la morfología de la montaña, caracterizada por verticales riscales que sobresalen del bosque que los acoge. En especial, destaca la singular silueta rocosa en forma de proa de barco sobre la que se asienta el santuario y castillo de Rocacorba; y más a la derecha destacan los repetidores de televisión que coronan la cima más alta del macizo, el Puigsou. Atravesamos un pequeño valle agrícola rodeado de pequeñas colinas aparte de los encrespados relieves de Rocacorba pasando por la aldea de Foleià, un conjunto de masías primorosamente restauradas, continuando por una bonita pista que se vuelve a adentrar en el bosque y que pasando por la masía Cadalt, en fase de restauración, nos conecta con la pista que sube, siguiendo la cresta del Serrat de la Cadalt, al ancho collado del Pla de Martí, debajo mismo del Puigsou. El trayecto por debajo de los riscos es muy atractivo, aunque hay rampas fuertes, afortunadamente cimentadas, lo que facilita la progresión. Hasta la cima del Puigsou sube una carretera que debemos dejar antes de llegar para alcanzar el objetivo del día, el santuario y el castillo de Rocacorba.
Rocacorba es una atalaya sobre los altos valles de Biert y Llémena y centinela avanzado del Pla de Girona.
El santuario se construyó en el s. XVIII sobre un antiguo castillo del s. XI, del que todavía son visibles algunos muros. Es del todo imprescindible acercarse hasta un mirador, un camino precioso nos conduce, para disfrutar de las panorámicas del día. Las espectaculares vistas abarcan, entre otros, los relieves pirenaicos en transito hacia el mar – Salinas, Alberes y Cabo de Creus – , la llanura ampurdanesa con el Montgrí y las Islas Medas, las Gavarres, el Montseny, el Far, el Cabrerès , Puigsacalm o los relieves que acompañan al Puigmal. La inmensidad y calma del lugar invita a la meditación y a disfrutar de la amplitud paisajística que se vislumbra desde la cima rocosa para recargar la mente de momentos especialmente positivos.
Volvemos hasta el Pla de Martí y continuamos por una pista que nos desciende a la aldea de Rocacorba formado por un conjunto de masías que parecen abandonadas, aunque hay indicios o intentos de restauración que parece no han tenido éxito, probablemente por el aislamiento del lugar . Continuamos bajando y atravesamos la riera de Rocacorba; un espléndido hayedo nos acompaña mientras nos deslizamos abobados por el fondo del valle antes de remontar hasta el collado del Portell. Remontamos un tramo más, aunque se puede continuar por la pista principal en bajada, y pedaleamos por la cresta del Serrat de Bruguetar continuando por el llano inclinado coronado por el Castellet y que nos baja al bellísimo valle de Llémena.
La ruta continúa río abajo por el margen izquierdo del Llèmena pedaleando encajados entre riscales hasta que encontramos, en Pla de Sant Joan, una buena pista que nos subirá al cráter del Volca del Puig de la Banya del Boc. Al principio de la subida pasamos por una antigua gredera donde se habían extraído los materiales piroclásticos hace algunas décadas antes de la protección del entorno del volcán. En la parte alta mientras atravesamos el antiguo cráter, ahora ocupado por cultivos pero claramente identificable, encontramos un pequeño panel con información geológica muy interesante sobre la erupción. Perdemos altura rápidamente por un camino boscano que nos lleva al vecindario de Llorà, de donde no se puede marchar sin echar un vistazo a la iglesia románica de Sant Pere.
Para acabar la ruta hay que realizar un tramo de carretera hasta encontrar la pista mas allá del pequeño vecindario de Ginestar que nos remonta hasta la aldea de Jonquerol, un conjunto de masías dispersas, desde donde accedemos, hay algunas rampas fuertes, al Collet de Miralles, punto desde donde volvemos en una rápida bajada a Canet d'Adri.
Diciembre de 2023
CENTROS DE INTERÉS
La Torre de Canet d’Adri. Santa Maria de Rocacorba. Castillo de Rocacorba. Sant Martí de Llemena. Volcan de la Banya del Boc. Sant Pere de Llorà.
ALOJAMIENTOS / RESTAURANTES
El Celler de l’Adroher. Telèfon: 972 42 82 70