Alt Empordà AEM 041_Boadella d’Empordà
Serra de les Avalls. Serra de la Quella. Penya-segats de la Muga. Pla d’Amigó
Boadella d’Empordà — Sobirats — Coll de la Salut — Sant Llorenç de la Muga — Sant Sebastià de la Muga — Darnius — Boadella d’Empordà
Mapes Comarcals de Catalunya. Alt Empordà. 1:50.000. Institut Cartogràfic de Catalunya (ICC).
http://www.icc.es/vissir3/
Resumen
Distancia:44 km
Desnivel:860 m
Tiempo:4 h 0 min
Dificultad:media-difícil
Real Fonería de San Sebastián de la Muga
Rara vez se tiene la oportunidad de ver un lugar singular como la Real Fonería de San Sebastián de la Muga, normalmente bajo las aguas del embalse de Darnius-Boadella. La sequía ha dejado de nuevo al descubierto el primer alto horno dedicado a la producción de hierro de fundición en Cataluña y, también, la ermita de la que toma el nombre. Éste es el objetivo de la ruta propuesta, aunque no es el único aliciente: el despoblado de Sobirats... Real Fonería de San Sebastián de la Muga
Rara vez se tiene la oportunidad de ver un lugar singular como la Real Fonería de San Sebastián de la Muga, normalmente bajo las aguas del embalse de Darnius-Boadella. La sequía ha dejado de nuevo al descubierto el primer alto horno dedicado a la producción de hierro de fundición en Cataluña y, también, la ermita de la que toma el nombre. Éste es el objetivo de la ruta propuesta, aunque no es el único aliciente: el despoblado de Sobirats, el Santuario de la Salud, la villa histórica medieval de San Lorenzo de la Muga o los parajes por el que transcurre son suficientemente importantes para hacerla y esperar a que en un futuro no muy lejano San Sebastián vuelva a dormir plácidamente bajo las aguas; sería un buen síntoma para todos los pueblos de la cuenca de la Muga y Cataluña en general.
En Boadella marchamos por la pista que transcurre por el margen derecho de la Muga. Pronto el camino sube hacia la montaña en dirección al despoblado de Sobirats. A medida que ganamos altura tenemos buenas vistas, a pesar de las nubes bajas, de los relieves que guían el río desde la cabecera a la llanura ampurdanesa. Repentinamente en un rellano del camino vemos, integrado en el etéreo paisaje, el despoblado de Sobirats presidiendo la abrupta sierra de les Avalls coronada por un arco de riscales calizas. El antiguo pueblo lo forman un núcleo de casas de techos derrumbados y firmes muros que aún aguantan el paso del tiempo. Cerrando los ojos todavía se pueden sentir sus pobladores trabajando por el poblado. Con los ojos abiertos al paisaje se convierte en abierto y extens disfrutanco de buenas vistas que abarcan hasta el mar y los pirineos orientales.
Continuamos por buena pista que marcha entre el frondoso bosque por debajo de los riscos calcáreos que coronan la sierra hasta la carretera el Coll de la Salut y de aquí, si se quiere, hasta el santuario del mismo nombre, un oasis de paz desde donde observar el monte de la Alta Garrotxa.
Desde el collado de la Salut sale un sendero con algún tramo bastante pedregoso que dificulta la ciclabilidad a pesar de ser de bajada, también se puede continuar por la carretera, y que nos conecta con otro de bella factura, muy bonito para hacer en bicicleta, que en paralelo a la carretera nos lleva a la villa medieval de Sant Llorenç de la Muga. Aunque no es necesario entrar, es de visita obligada por su interesante casco antiguo. Para llegar atravesamos la Muga por el puente medieval, cerca de la capilla de Sant Andreu, y nos adentramos en el pueblo por el portal de Baix. Sant Llorenç está lleno de rincones muy agradables que forman parte de la historia del pueblo: la muralla configurada por las mismas casas, los tres portales de acceso, diferentes torres circulares o de base cuadrada ubicadas en medio de la muralla, la iglesia parroquial de Sant Llorenç o el canal de riego que atraviesa el casco antiguo por el norte de la muralla donde se conservan lavaderos públicos y también algunos privados son un claro ejemplo. Recuperar fuerzas en el bar de la Sociedad de la Fraternidad es una opción más para adentrarse en esta villa.
Continuamos la ruta desde el puente medieval siguiendo un camino arreglado que va por la derecha de la Muga. Conectamos con la pista que lleva a la presa de Boadella pero seguidamente la dejamos por un camino a la izquierda que nos adentra en un mundo que parece de ciencia ficción. Pedaleamos por la cola del pantano, largo tiempo sedienta por la sequía y que nos muestra un paisaje tan desolador como bello. Siguiendo las trazas de los vehículos que se han adentrado navegamos por un suelo descuartizado donde crecen plantas desconocidas de tallos alargados hacia el paraje, hasta ahora escondido bajo las aguas, de San Sebastián de la Muga. De pie todavía encontramos dos edificios singulares: la fundición y la ermita.
La Real Fonería de San Sebastián de la Muga es considerado el primer alto horno dedicado a la producción de hierro de fundición en Cataluña. Fue una iniciativa de Pere Grau Balló París (1721-1780) quien en 1766 obtuvo autorización real para explorar y explotar las minas de hierro del término de Sant Llorenç de la Muga. La construcción del edificio se llevó a cabo entre los años 1768 y 1771 y empezó a producir en 1773. La fundición se orientó hacia la producción de armamento y munición (proyectiles de artillería) bajo control de la Secretaría de Guerra y bajo la dirección del ingeniero suizo Jean Maritz (director de las fundiciones militares). La producción se transportaba a continuación a la ciudadela de Roses y servía para proveer al ejército. Durante la Guerra Grande se convirtió en objetivo militar y fue ocupada y destruida por el general francés Pierre François Charles Augereau y sus tropas, en la Batalla de Sant Llorenç de la Muga (1794).
Deshacemos un tramo del camino hasta el Pont de Rimbau, continuamos por debajo de los Penya-segats de la Muga hasta encontrar el flanco por donde atacar la ascensión al Pla d'Amigó, nombre que toma de una masía por la que pasamos. Concluida la ascensión perdemos altura entre alcornoques y encinares, algunos de carácter monumental, hasta la segunda cola del pantano. Un centenar de metros allá del puente que lo atraviesa tomamos una pista de fuertes pendientes que nos deja en la sencilla y bella ermita de Sant Esteve del Llop que según algunos autores perteneció a la orden del Temple y que conserva un ábside semicircular de los inicios del románico (siglo X-XI). Llegamos a Darnius siguiendo el valle del Ricardell. Continuamos la ruta hasta Coll del Hospital desde donde conectamos varias pistas a ambos lados de la sierra de Rocamelera para llegar a la presa del embalse de Darnius-Boadella.
Al otro lado de la presa tomamos un sendero que nos baja al fondo del torrente de Canamars, enlazando con la pista que transcurre por debajo de la Sierra de Santa Magdalena, una montaña de cimadal de roca calcárea coronada por la ermita que hemos visualizado en muchos tramos de la ruta y que ahora nos acompaña en el tramo final. Llegamos a Boadella d´Empordà por carretera.
Enero de 2024
CENTROS DE INTERÉS
Sobirats. Santuario de la Mare de Déu de la Salut. Sant Llorenç de la Muga. Reial Foneria de Sant Sebastià de la Muga. Sant Sebastià de la Muga. Sant Esteve del Llop. Santa Maria de Darnius.
RESTAURANTES / ALOJAMIENTOS
https://www.salines-bassegoda.org/ca/
Rara vez se tiene la oportunidad de ver un lugar singular como la Real Fonería de San Sebastián de la Muga, normalmente bajo las aguas del embalse de Darnius-Boadella. La sequía ha dejado de nuevo al descubierto el primer alto horno dedicado a la producción de hierro de fundición en Cataluña y, también, la ermita de la que toma el nombre. Éste es el objetivo de la ruta propuesta, aunque no es el único aliciente: el despoblado de Sobirats... Real Fonería de San Sebastián de la Muga
Rara vez se tiene la oportunidad de ver un lugar singular como la Real Fonería de San Sebastián de la Muga, normalmente bajo las aguas del embalse de Darnius-Boadella. La sequía ha dejado de nuevo al descubierto el primer alto horno dedicado a la producción de hierro de fundición en Cataluña y, también, la ermita de la que toma el nombre. Éste es el objetivo de la ruta propuesta, aunque no es el único aliciente: el despoblado de Sobirats, el Santuario de la Salud, la villa histórica medieval de San Lorenzo de la Muga o los parajes por el que transcurre son suficientemente importantes para hacerla y esperar a que en un futuro no muy lejano San Sebastián vuelva a dormir plácidamente bajo las aguas; sería un buen síntoma para todos los pueblos de la cuenca de la Muga y Cataluña en general.
En Boadella marchamos por la pista que transcurre por el margen derecho de la Muga. Pronto el camino sube hacia la montaña en dirección al despoblado de Sobirats. A medida que ganamos altura tenemos buenas vistas, a pesar de las nubes bajas, de los relieves que guían el río desde la cabecera a la llanura ampurdanesa. Repentinamente en un rellano del camino vemos, integrado en el etéreo paisaje, el despoblado de Sobirats presidiendo la abrupta sierra de les Avalls coronada por un arco de riscales calizas. El antiguo pueblo lo forman un núcleo de casas de techos derrumbados y firmes muros que aún aguantan el paso del tiempo. Cerrando los ojos todavía se pueden sentir sus pobladores trabajando por el poblado. Con los ojos abiertos al paisaje se convierte en abierto y extens disfrutanco de buenas vistas que abarcan hasta el mar y los pirineos orientales.
Continuamos por buena pista que marcha entre el frondoso bosque por debajo de los riscos calcáreos que coronan la sierra hasta la carretera el Coll de la Salut y de aquí, si se quiere, hasta el santuario del mismo nombre, un oasis de paz desde donde observar el monte de la Alta Garrotxa.
Desde el collado de la Salut sale un sendero con algún tramo bastante pedregoso que dificulta la ciclabilidad a pesar de ser de bajada, también se puede continuar por la carretera, y que nos conecta con otro de bella factura, muy bonito para hacer en bicicleta, que en paralelo a la carretera nos lleva a la villa medieval de Sant Llorenç de la Muga. Aunque no es necesario entrar, es de visita obligada por su interesante casco antiguo. Para llegar atravesamos la Muga por el puente medieval, cerca de la capilla de Sant Andreu, y nos adentramos en el pueblo por el portal de Baix. Sant Llorenç está lleno de rincones muy agradables que forman parte de la historia del pueblo: la muralla configurada por las mismas casas, los tres portales de acceso, diferentes torres circulares o de base cuadrada ubicadas en medio de la muralla, la iglesia parroquial de Sant Llorenç o el canal de riego que atraviesa el casco antiguo por el norte de la muralla donde se conservan lavaderos públicos y también algunos privados son un claro ejemplo. Recuperar fuerzas en el bar de la Sociedad de la Fraternidad es una opción más para adentrarse en esta villa.
Continuamos la ruta desde el puente medieval siguiendo un camino arreglado que va por la derecha de la Muga. Conectamos con la pista que lleva a la presa de Boadella pero seguidamente la dejamos por un camino a la izquierda que nos adentra en un mundo que parece de ciencia ficción. Pedaleamos por la cola del pantano, largo tiempo sedienta por la sequía y que nos muestra un paisaje tan desolador como bello. Siguiendo las trazas de los vehículos que se han adentrado navegamos por un suelo descuartizado donde crecen plantas desconocidas de tallos alargados hacia el paraje, hasta ahora escondido bajo las aguas, de San Sebastián de la Muga. De pie todavía encontramos dos edificios singulares: la fundición y la ermita.
La Real Fonería de San Sebastián de la Muga es considerado el primer alto horno dedicado a la producción de hierro de fundición en Cataluña. Fue una iniciativa de Pere Grau Balló París (1721-1780) quien en 1766 obtuvo autorización real para explorar y explotar las minas de hierro del término de Sant Llorenç de la Muga. La construcción del edificio se llevó a cabo entre los años 1768 y 1771 y empezó a producir en 1773. La fundición se orientó hacia la producción de armamento y munición (proyectiles de artillería) bajo control de la Secretaría de Guerra y bajo la dirección del ingeniero suizo Jean Maritz (director de las fundiciones militares). La producción se transportaba a continuación a la ciudadela de Roses y servía para proveer al ejército. Durante la Guerra Grande se convirtió en objetivo militar y fue ocupada y destruida por el general francés Pierre François Charles Augereau y sus tropas, en la Batalla de Sant Llorenç de la Muga (1794).
Deshacemos un tramo del camino hasta el Pont de Rimbau, continuamos por debajo de los Penya-segats de la Muga hasta encontrar el flanco por donde atacar la ascensión al Pla d'Amigó, nombre que toma de una masía por la que pasamos. Concluida la ascensión perdemos altura entre alcornoques y encinares, algunos de carácter monumental, hasta la segunda cola del pantano. Un centenar de metros allá del puente que lo atraviesa tomamos una pista de fuertes pendientes que nos deja en la sencilla y bella ermita de Sant Esteve del Llop que según algunos autores perteneció a la orden del Temple y que conserva un ábside semicircular de los inicios del románico (siglo X-XI). Llegamos a Darnius siguiendo el valle del Ricardell. Continuamos la ruta hasta Coll del Hospital desde donde conectamos varias pistas a ambos lados de la sierra de Rocamelera para llegar a la presa del embalse de Darnius-Boadella.
Al otro lado de la presa tomamos un sendero que nos baja al fondo del torrente de Canamars, enlazando con la pista que transcurre por debajo de la Sierra de Santa Magdalena, una montaña de cimadal de roca calcárea coronada por la ermita que hemos visualizado en muchos tramos de la ruta y que ahora nos acompaña en el tramo final. Llegamos a Boadella d´Empordà por carretera.
Enero de 2024
CENTROS DE INTERÉS
Sobirats. Santuario de la Mare de Déu de la Salut. Sant Llorenç de la Muga. Reial Foneria de Sant Sebastià de la Muga. Sant Sebastià de la Muga. Sant Esteve del Llop. Santa Maria de Darnius.
RESTAURANTES / ALOJAMIENTOS
https://www.salines-bassegoda.org/ca/