Alt Empordà AEM 020_Roses
Parc Natural del Cap de Creus. Punta Falconera-Cap de Norfeu. El Pení
Roses – L’Almadrava – Montjoi – Coll del Canadell – Coll del Pení – Mas dles Arbres – Can Causa – Roses
Resumen
Distancia:27 km
Desnivel:720 m
Tiempo:2 h 45 min
Dificultad:media
Ruta de contacto
Cuando los Pirineos se sumergen en el mar
Una ruta por el sur de la península del Cap de Creus donde confluyen las sensaciones evocadoras de la inmensidad del mar y la magnificencia de la montaña. Pedalear por el entorno de El Pení es un auténtico placer y nos permite disfrutar de grandes panorámicas de los perfiles que dibujan la costa del Alt Empordà y los relieves pirenaicos que la generan.
Salimos de Roses siguiendo el paseo marítimo en dirección a las playas... Cuando los Pirineos se sumergen en el mar
Una ruta por el sur de la península del Cap de Creus donde confluyen las sensaciones evocadoras de la inmensidad del mar y la magnificencia de la montaña. Pedalear por el entorno de El Pení es un auténtico placer y nos permite disfrutar de grandes panorámicas de los perfiles que dibujan la costa del Alt Empordà y los relieves pirenaicos que la generan.
Salimos de Roses siguiendo el paseo marítimo en dirección a las playas de Canyelles Petites y Canyelles Grans, también conocida como la Almadraba. La intensa luz proveniente del mar inunda los ojos de azul. Seguimos todo este tramo de costa con la ladera de la montaña alfombrada de apartamentos que afortunadamente desaparecen pasada la Punta de la Almadraba, punto donde entramos de lleno en el Parque Natural del Cap de Creus.
El paisaje cambia completamente. Dejamos atrás el voraz y devastador urbanismo. El mar y la montaña parecen ir de la mano. La simbiosis es total y nos integramos fácilmente en este nuevo entorno disfrutando plenamente. Pasamos por el Coll de Punta Falconera, un enclave estratégico desde donde se dominan las aguas entre las Islas Medes y Norfeu, lo que motivó su uso histórico como punto de vigía y vigilancia del tráfico marítimo. Fruto de este uso, hay toda una red subterránea de galerías y pasillos que salen a la superficie a través de bunkers, donde se pueden ver las salas de las baterías de tiro y los agujeros por donde sobresalían los cañones. Esta batería formaba parte del plan de fortificaciones del eje pirenaico, conocido como Línea P, decidido por la dictadura franquista para prevenir una posible invasión aliada durante la Segunda Guerra Mundial. Actualmente los bunkers de Falconera forman parte del patrimonio de Roses.
Pedaleamos sin dificultades para alcanzar la pequeña carretera que nos lleva hasta el bucólico paraje de Cala Montjoi (donde estaba el conocido restaurante de El Bulli, ahora en obras) y Cala Calitjàs, con la hermosa silueta de la península del Cap Norfeu que nos acompaña en todo momento.
Nos elevamos dejando el mar atrás por la cresta que conecta la península del Cap Norfeu con el Puig Alt. Encontramos algunos tramos empinados que se resuelven con un poco de intensidad. Mientras subimos hacia el este vemos los restos del Mas de Figa, una masía como tantas otras de las comarcas marítimas que fue fortificada para prevenir el peligro de la piratería, que durante los siglos XVI y XVII aumentó consideradamente. Todavía se puede ver la torre circular fortificada. Sobrepuesta a los restos de la torre original se construyó un cuerpo circular de piedra seca en la parte superior, para poder utilizar la torre como una gran tina coincidiendo con la gran expansión del cultivo de la vid en el siglo XVIII. En el interior se puede ver el lagar o depósito y otros elementos para la elaboración del vino. Llegamos a un pequeño collado en el norte del Puig Alt. Las panorámicas de las que disfrutamos desde este punto nos muestran claramente como el Pirineo, siguiendo los relieves desde el Canigó, se proyecta directamente al mediterráneo en el Cap de Creus.
Nos dirigimos hacia el extraordinario Pla de Can Causa, donde están los restos de la casa del mismo nombre, pasando por el Mas dels Arbres. Un lugar de extremada belleza desde donde contemplar, con la calma que nos permite la ausencia de la tramontana, la gran bahía de Roses.
A partir de la casa, un sendero señalizado se deja caer hacia el barranco que han excavado las aguas del Torrent Palet. Un camino que requiere un buen nivel técnico si se quiere hacer todo encima de la bicicleta y que los ciclistas más experimentados sabrán apreciar. La pista que encontramos en la parte baja pasa al lado de la Bassa del Sorral de Mas Ponac y nos deja en una carretera desde donde llegamos, enlazando por el Camí del Cementiri Vell, repleto de olivos, de nuevo a Roses.
Noviembre de 2017
CENTROS DE INTERÉS
Mas fortificado de Figa.
RESTAURANTES / ALOJAMIENTOS
http://ca.visit.roses.cat/
Una ruta por el sur de la península del Cap de Creus donde confluyen las sensaciones evocadoras de la inmensidad del mar y la magnificencia de la montaña. Pedalear por el entorno de El Pení es un auténtico placer y nos permite disfrutar de grandes panorámicas de los perfiles que dibujan la costa del Alt Empordà y los relieves pirenaicos que la generan.
Salimos de Roses siguiendo el paseo marítimo en dirección a las playas... Cuando los Pirineos se sumergen en el mar
Una ruta por el sur de la península del Cap de Creus donde confluyen las sensaciones evocadoras de la inmensidad del mar y la magnificencia de la montaña. Pedalear por el entorno de El Pení es un auténtico placer y nos permite disfrutar de grandes panorámicas de los perfiles que dibujan la costa del Alt Empordà y los relieves pirenaicos que la generan.
Salimos de Roses siguiendo el paseo marítimo en dirección a las playas de Canyelles Petites y Canyelles Grans, también conocida como la Almadraba. La intensa luz proveniente del mar inunda los ojos de azul. Seguimos todo este tramo de costa con la ladera de la montaña alfombrada de apartamentos que afortunadamente desaparecen pasada la Punta de la Almadraba, punto donde entramos de lleno en el Parque Natural del Cap de Creus.
El paisaje cambia completamente. Dejamos atrás el voraz y devastador urbanismo. El mar y la montaña parecen ir de la mano. La simbiosis es total y nos integramos fácilmente en este nuevo entorno disfrutando plenamente. Pasamos por el Coll de Punta Falconera, un enclave estratégico desde donde se dominan las aguas entre las Islas Medes y Norfeu, lo que motivó su uso histórico como punto de vigía y vigilancia del tráfico marítimo. Fruto de este uso, hay toda una red subterránea de galerías y pasillos que salen a la superficie a través de bunkers, donde se pueden ver las salas de las baterías de tiro y los agujeros por donde sobresalían los cañones. Esta batería formaba parte del plan de fortificaciones del eje pirenaico, conocido como Línea P, decidido por la dictadura franquista para prevenir una posible invasión aliada durante la Segunda Guerra Mundial. Actualmente los bunkers de Falconera forman parte del patrimonio de Roses.
Pedaleamos sin dificultades para alcanzar la pequeña carretera que nos lleva hasta el bucólico paraje de Cala Montjoi (donde estaba el conocido restaurante de El Bulli, ahora en obras) y Cala Calitjàs, con la hermosa silueta de la península del Cap Norfeu que nos acompaña en todo momento.
Nos elevamos dejando el mar atrás por la cresta que conecta la península del Cap Norfeu con el Puig Alt. Encontramos algunos tramos empinados que se resuelven con un poco de intensidad. Mientras subimos hacia el este vemos los restos del Mas de Figa, una masía como tantas otras de las comarcas marítimas que fue fortificada para prevenir el peligro de la piratería, que durante los siglos XVI y XVII aumentó consideradamente. Todavía se puede ver la torre circular fortificada. Sobrepuesta a los restos de la torre original se construyó un cuerpo circular de piedra seca en la parte superior, para poder utilizar la torre como una gran tina coincidiendo con la gran expansión del cultivo de la vid en el siglo XVIII. En el interior se puede ver el lagar o depósito y otros elementos para la elaboración del vino. Llegamos a un pequeño collado en el norte del Puig Alt. Las panorámicas de las que disfrutamos desde este punto nos muestran claramente como el Pirineo, siguiendo los relieves desde el Canigó, se proyecta directamente al mediterráneo en el Cap de Creus.
Nos dirigimos hacia el extraordinario Pla de Can Causa, donde están los restos de la casa del mismo nombre, pasando por el Mas dels Arbres. Un lugar de extremada belleza desde donde contemplar, con la calma que nos permite la ausencia de la tramontana, la gran bahía de Roses.
A partir de la casa, un sendero señalizado se deja caer hacia el barranco que han excavado las aguas del Torrent Palet. Un camino que requiere un buen nivel técnico si se quiere hacer todo encima de la bicicleta y que los ciclistas más experimentados sabrán apreciar. La pista que encontramos en la parte baja pasa al lado de la Bassa del Sorral de Mas Ponac y nos deja en una carretera desde donde llegamos, enlazando por el Camí del Cementiri Vell, repleto de olivos, de nuevo a Roses.
Noviembre de 2017
CENTROS DE INTERÉS
Mas fortificado de Figa.
RESTAURANTES / ALOJAMIENTOS
http://ca.visit.roses.cat/