Selva SEL 029_Santa Coloma de Farners
Les Guilleries. Serra del Corb. Serra del Bagissot. Turó del Vent. El Roclar. Massís de Farners
Santa Coloma de Farners — Collet de Can Salvatgina — Monestir de Sant Salvi — Castell de Farners — Santa Coloma de Farners
Mapa digital Comarcal. Selva. 1:50.000. Institut Cartogràfic de Catalunya (ICC).
Resumen
Distancia:34 km
Desnivel:1110 m
Tiempo:3 h 45 min
Dificultad:media-difícil
Monasterio de Sant Salvi.
Viaje que visita dos joyas a ambos lados de la Riera de Santa Coloma. La primera, el conjunto monástico del Monasterio de Sant Salvi, ubicado entre la riera y la vertiente sur de la Sierra del Corb. Y la segunda, coronando el Turó de Farners, el conjunto formado por el Castell de Farners y la iglesia. Dos conjuntos imperdibles pedaleando por el fantástico territorio de las Guilleries.
Empezamos la ruta en el Parque de Sant Salvador por e... Monasterio de Sant Salvi.
Viaje que visita dos joyas a ambos lados de la Riera de Santa Coloma. La primera, el conjunto monástico del Monasterio de Sant Salvi, ubicado entre la riera y la vertiente sur de la Sierra del Corb. Y la segunda, coronando el Turó de Farners, el conjunto formado por el Castell de Farners y la iglesia. Dos conjuntos imperdibles pedaleando por el fantástico territorio de las Guilleries.
Empezamos la ruta en el Parque de Sant Salvador por el margen derecho de la riera de Santa Coloma. A partir de la Font Picant, Fuente de agua con un toque picante, comienza un bonito sendero junto al río que nos deja en unos viveros. Continuamos por pista pasando por la Gorga d´en Vilà, una piscina natural que antiguamente había sido un lugar que los colomenses utilizaban como zona de baño y donde muchos aprendían a nadar.
Pasado el espacio conocido como las Alzines Balladores “Encinas Bailadoras” debemos tomar un camino poco fresado, a la derecha de la empresa de los viveros, que se adentra en la chopera y que hacia el final nos obliga a atravesar el río, no hay ninguna pasarela, para contactar con la carretera que sube de Santa Coloma. La seguimos justo hasta pasar por debajo de uno de los viaductos del Eix Transversal o C-25.
Dejamos la carretera y continuamos por un camino que lleva a Ca n'Uix o Mas Huix. Engullidos por la sombría fronda nos salimos por el Collet de Salvatgina, punto de paso hacia las vertientes sur de las estribaciones de la Sierra del Corb, la unidad de relieve por la que nos movemos. Disfrutamos de una vista de los relieves de la frontera sur del Macizo de las Guilleries y en especial destacan las siluetas inconfundibles del Turó de l’Home, les Agudes y el Matagallas, cimas todas ellas del macizo del Montseny. Más allá del Mas Huix aprovechamos para desviarnos hasta un pequeño mirador que han acondicionado los propietarios de la masía para disfrutar del valle por donde hemos subido, la llanura selvatana e, incluso, el mar plano detrás del Montnegre.
Pronto la solemne silueta del Monasterio de Sant Salvi emerge sobre una colina de entre la vegetación, cientos de metros por debajo de nosotros. Continuamos subiendo suavemente entre un espeso bosque hasta encontrar la cabecera de la riera del Sot de la Mina donde nos desviamos hacia la colina de las Roques del Reyi, un buen mirador coronado por una cruz de hierro dedicada al obispo Salvi Huix y lugar donde iniciamos el descenso hacia el conjunto monástico.
Sant Salvi es un monasterio franciscano, actualmente reformado como casa rural o para acoger eventos, fundado sobre una antigua ermita mencionada por primera vez en 1282. Fue fundado en 1690 por Francesc de Bournonville, marqués de Rupit y señor de Santa Coloma, y lo legó a los franciscanos que fundaron el convento que estuvo activo hasta el año 1822. Posteriormente se convirtió en una gran masía. El monasterio fue rehecho en el siglo XVIII, cuando llegó a tener dieciocho religiosos. La iglesia fue reconstruida en 1801 y es un edificio sencillo y austero, de una nave con ábside semicircular y dos capillas laterales a cada lado. Tiene un campanario de espadaña de dos ojos. A su lado se encuentra un claustro, alrededor del cual estaban las celdas de los monjes. En el exterior se conservan los siete contrafuertes de la cabecera, pero todas las cubiertas han desaparecido.
Una pista de arenisca bien compactada, cómoda y rápida nos baja al fondo del valle entre alcornoques y pinares generosos. Salimos a la carretera de Santa Coloma que seguimos unos metros a la derecha, para desviarnos después pasado el puente de la Casilla, por una pista poco clara que atraviesa la riera y conecta con una pista más confortable que lleva a Can Bagis , histórica masía de grandes dimensiones catalogada, junto al molino, en el Inventario del Patrimonio Arquitectónico de Cataluña. Aunque no hace falta, vale la pena pasar por allí.
Continuamos ascendiendo para superar la Sierra del Bagissot para visitar el conjunto arquitectónico ubicado en el Turó de Farners, tanto el castillo que lo corona como la ermita que se ubica a los pies de este. No se conservas vestigios de la primitiva iglesia del siglo XI, construida como capilla extramuros del castillo, pero si de la construcción hecha en el año 1200, fecha en que fue consagrada la iglesia. A esta época corresponden el ábside y parte de los muros laterales. La mayor parte del edificio proviene de la ampliación barroca que fue añadida a la iglesia románica y al que corresponde el porche. Es una ermita muy querida en Santa Coloma.
La visita al castillo es imprescindible, aunque el último tramo debe realizarse a pie. Arquitectónicamente sigue el modelo de los castillos del s. XI-XII, con una torre maestra, en este caso redonda y de 12 m. de altura, y un recinto que le rodea limitado por una muralla almenada. En el interior del recinto se pueden ver algunos restos de habitaciones y salas. Se trata de un espacio sencillo pero muy bonito, y que fácilmente le transporta a épocas lejanas. Puedes visitar el recinto que rodea la torre, pasear por el paso de ronda y, sobre todo, subir a la torre, un mirador excepcional de Santa Coloma de Farners, Guilleries y la llanura de la Selva.
La ruta continúa, aunque se puede recortar bajando directamente al punto de salida por la pista principal, hasta la Torre d'en Planes para disfrutar del abrupto macizo de Farners con un excepcional descenso por senderos hasta el punto de salida, algunos de ellos de bella factura como el tramp del Rocar.
Diciembre de 2022
CENTROS DE INTERÉS
Monasterio de Sant Salvi. Virgen de Farners. Castillo de Farners.
ALOJAMIENTO / RESTAURANTES
https://www.turismehostalric.cat
Viaje que visita dos joyas a ambos lados de la Riera de Santa Coloma. La primera, el conjunto monástico del Monasterio de Sant Salvi, ubicado entre la riera y la vertiente sur de la Sierra del Corb. Y la segunda, coronando el Turó de Farners, el conjunto formado por el Castell de Farners y la iglesia. Dos conjuntos imperdibles pedaleando por el fantástico territorio de las Guilleries.
Empezamos la ruta en el Parque de Sant Salvador por e... Monasterio de Sant Salvi.
Viaje que visita dos joyas a ambos lados de la Riera de Santa Coloma. La primera, el conjunto monástico del Monasterio de Sant Salvi, ubicado entre la riera y la vertiente sur de la Sierra del Corb. Y la segunda, coronando el Turó de Farners, el conjunto formado por el Castell de Farners y la iglesia. Dos conjuntos imperdibles pedaleando por el fantástico territorio de las Guilleries.
Empezamos la ruta en el Parque de Sant Salvador por el margen derecho de la riera de Santa Coloma. A partir de la Font Picant, Fuente de agua con un toque picante, comienza un bonito sendero junto al río que nos deja en unos viveros. Continuamos por pista pasando por la Gorga d´en Vilà, una piscina natural que antiguamente había sido un lugar que los colomenses utilizaban como zona de baño y donde muchos aprendían a nadar.
Pasado el espacio conocido como las Alzines Balladores “Encinas Bailadoras” debemos tomar un camino poco fresado, a la derecha de la empresa de los viveros, que se adentra en la chopera y que hacia el final nos obliga a atravesar el río, no hay ninguna pasarela, para contactar con la carretera que sube de Santa Coloma. La seguimos justo hasta pasar por debajo de uno de los viaductos del Eix Transversal o C-25.
Dejamos la carretera y continuamos por un camino que lleva a Ca n'Uix o Mas Huix. Engullidos por la sombría fronda nos salimos por el Collet de Salvatgina, punto de paso hacia las vertientes sur de las estribaciones de la Sierra del Corb, la unidad de relieve por la que nos movemos. Disfrutamos de una vista de los relieves de la frontera sur del Macizo de las Guilleries y en especial destacan las siluetas inconfundibles del Turó de l’Home, les Agudes y el Matagallas, cimas todas ellas del macizo del Montseny. Más allá del Mas Huix aprovechamos para desviarnos hasta un pequeño mirador que han acondicionado los propietarios de la masía para disfrutar del valle por donde hemos subido, la llanura selvatana e, incluso, el mar plano detrás del Montnegre.
Pronto la solemne silueta del Monasterio de Sant Salvi emerge sobre una colina de entre la vegetación, cientos de metros por debajo de nosotros. Continuamos subiendo suavemente entre un espeso bosque hasta encontrar la cabecera de la riera del Sot de la Mina donde nos desviamos hacia la colina de las Roques del Reyi, un buen mirador coronado por una cruz de hierro dedicada al obispo Salvi Huix y lugar donde iniciamos el descenso hacia el conjunto monástico.
Sant Salvi es un monasterio franciscano, actualmente reformado como casa rural o para acoger eventos, fundado sobre una antigua ermita mencionada por primera vez en 1282. Fue fundado en 1690 por Francesc de Bournonville, marqués de Rupit y señor de Santa Coloma, y lo legó a los franciscanos que fundaron el convento que estuvo activo hasta el año 1822. Posteriormente se convirtió en una gran masía. El monasterio fue rehecho en el siglo XVIII, cuando llegó a tener dieciocho religiosos. La iglesia fue reconstruida en 1801 y es un edificio sencillo y austero, de una nave con ábside semicircular y dos capillas laterales a cada lado. Tiene un campanario de espadaña de dos ojos. A su lado se encuentra un claustro, alrededor del cual estaban las celdas de los monjes. En el exterior se conservan los siete contrafuertes de la cabecera, pero todas las cubiertas han desaparecido.
Una pista de arenisca bien compactada, cómoda y rápida nos baja al fondo del valle entre alcornoques y pinares generosos. Salimos a la carretera de Santa Coloma que seguimos unos metros a la derecha, para desviarnos después pasado el puente de la Casilla, por una pista poco clara que atraviesa la riera y conecta con una pista más confortable que lleva a Can Bagis , histórica masía de grandes dimensiones catalogada, junto al molino, en el Inventario del Patrimonio Arquitectónico de Cataluña. Aunque no hace falta, vale la pena pasar por allí.
Continuamos ascendiendo para superar la Sierra del Bagissot para visitar el conjunto arquitectónico ubicado en el Turó de Farners, tanto el castillo que lo corona como la ermita que se ubica a los pies de este. No se conservas vestigios de la primitiva iglesia del siglo XI, construida como capilla extramuros del castillo, pero si de la construcción hecha en el año 1200, fecha en que fue consagrada la iglesia. A esta época corresponden el ábside y parte de los muros laterales. La mayor parte del edificio proviene de la ampliación barroca que fue añadida a la iglesia románica y al que corresponde el porche. Es una ermita muy querida en Santa Coloma.
La visita al castillo es imprescindible, aunque el último tramo debe realizarse a pie. Arquitectónicamente sigue el modelo de los castillos del s. XI-XII, con una torre maestra, en este caso redonda y de 12 m. de altura, y un recinto que le rodea limitado por una muralla almenada. En el interior del recinto se pueden ver algunos restos de habitaciones y salas. Se trata de un espacio sencillo pero muy bonito, y que fácilmente le transporta a épocas lejanas. Puedes visitar el recinto que rodea la torre, pasear por el paso de ronda y, sobre todo, subir a la torre, un mirador excepcional de Santa Coloma de Farners, Guilleries y la llanura de la Selva.
La ruta continúa, aunque se puede recortar bajando directamente al punto de salida por la pista principal, hasta la Torre d'en Planes para disfrutar del abrupto macizo de Farners con un excepcional descenso por senderos hasta el punto de salida, algunos de ellos de bella factura como el tramp del Rocar.
Diciembre de 2022
CENTROS DE INTERÉS
Monasterio de Sant Salvi. Virgen de Farners. Castillo de Farners.
ALOJAMIENTO / RESTAURANTES
https://www.turismehostalric.cat