Anoia ANO 013_La Llacuna
Espai d'Interès Natural Ancosa-Montagut. Serra d’Ancosa. Plana d’Ancosa
La Llacuna – Castell de Vilademàger – Collet de la Serra – Puig Castellar – Convent d’Ancosa – La Llacuna.
Mapes Comarcals de Catalunya. Anoia. 1:50.000. Institut Cartogràfic de Catalunya (ICC).
Resumen
Distancia:24 km
Desnivel:550 m
Tiempo:2 h 15 min
Dificultad:fácil
La Plana d?Ancosa
La Plana d?Ancosa es un territorio singular que abarca en poco más de un kilómetro cuadrado los restos de un convento cisterciense, con su pozo medieval, un roble monumental y una curiosa sima vertical. Antes de llegar la ruta visita también el castillo de Vilademàger y Puig Castellar, desde donde se disfruta de grandes panorámicas.
Salimos de la plaza porticada del pueblo por el portal d?en Garreta, una de las entradas a la antigua villa mediev... La Plana d’Ancosa
La Plana d’Ancosa es un territorio singular que abarca en poco más de un kilómetro cuadrado los restos de un convento cisterciense, con su pozo medieval, un roble monumental y una curiosa sima vertical. Antes de llegar la ruta visita también el castillo de Vilademàger y Puig Castellar, desde donde se disfruta de grandes panorámicas.
Salimos de la plaza porticada del pueblo por el portal d’en Garreta, una de las entradas a la antigua villa medieval amurallada. Vamos en dirección al cementerio, desde donde sale la pista que, con algunos tramos de fuerte pendiente, sube al castillo de Vilademàger, que actualmente conserva restos de torres semicirculares y del recinto amurallado.
En el interior de lo que era el recinto amurallado se conserva magníficamente la iglesia de Sant Pere de Vilademàger. En una de las bóvedas de la iglesia se conservan unas pinturas murales fechadas a inicios del siglo XI. En el interior también se conserva una pila bautismal de características románicas.
Continuamos la ruta hasta el collado entre las sierras de Rocamur y La Llacuna. Cresteamos toda la Serra d’Ancosa hasta encontrar la carretera que sube de Sant Martí Sarroca. Durante el trayecto podemos ver ocasionalmente el mar más allá de las cordilleras que encierran la cabecera del Foix y que nos separan del llano del Alt Penedès.
En el Collet de la Serra nos desviamos para iniciar la ascensión a Puig Castellar. Paradójicamente debemos perder un poco de altura hasta Cal Manyo para ir a buscar la pista que nos sube a la cima. Antes de empezar a perder altura, justo en una clara bifurcación se encuentran, sólo a medio kilómetro de distancia, los restos del poblado ibérico de Puig Castellar, que se pueden visitar opcionalmente; incluso empujando la bici se puede subir a la cima por el sendero, ya que no hay más de cincuenta metros de desnivel.
La relativa altura de la cima de Puig Castellar, 944 m, uno de los más altos de la comarca de l’Anoia, nos permite disfrutar de buenas panorámicas de las sierras cercanas pertenecientes al Sistema Prelitoral Central: Montmell, Ordal, Garraf, Montserrat, Miralles, Comaverd o Prades. En días claros, a pesar de la distancia, también se ven cercanas las cordilleras del Prepirineo que cierran la Depresión Central: Port del Compte, Cadí, Pedraforca, Ensija, Moixeró o Puigmal.
Aunque desde la cima podemos recortar la ruta, nuestro segundo objetivo es la Plana d’Ancosa, que vale la pena visitar. Para llegar deshacemos el camino y alargamos la ruta por la cresta de la Serra dels Esgavellats hasta el collado de la Rimbalda. Todo el trayecto es pedregoso pero muy interesante. Esta llanura o penillanura rocosa, cerrada por todos lados excepto por el paso por donde fluye el torrente de la Llançana nos ofrece un paisaje singular que esconde lugares interesantes que la ruta visita: el antiguo convento d’Ancosa, con su pozo medieval, el roble monumental y la sima.
El antiguo Convent d’Ancosa, del que sólo quedan unos restos al norte de la casa d’Ancosa, fue cedido el 1155 a los monjes cistercienses de Valldaura por los condes de Barcelona para que establecieran un monasterio. Probablemente las carencias de agua y la pobreza del terreno empujaron a los monjes a instalarse el 1158 en Santes Creus. El lugar quedó como una granja propiedad de Santes Creus. Cercana a la granja hay también una joya arquitectónica, el pozo medieval d’Ancosa, que tiene una profundidad de 9 m por 3 m de diámetro y una magnífica bóveda que lo cubre.
Antes de llegar al lugar d’Ancosa pasaremos por la sima d’Ancosa, una cavidad natural de origen hidráulico con entrada vertical y una profundidad de más de 30 metros. Y un poco más allá encontramos el roble d’Ancosa, catalogado como árbol monumental con una copa enorme y con 437 cm de perímetro de tronco.
Desde la casa d’Ancosa la pista principal sale del llano por el collado de Corral, desde donde, dando un rodeo por la pista de la izquierda, llegamos a La Llacuna.
Diciembre de 2015
CENTROS DE INTERÉS
Sant Pere de Màger. Castell de Màger. Poblado Ibérico de Puig Castellar. Convento, Pozo Medieval, Roble y Sima d’Ancosa.
ALOJAMIENTOS / RESTAURANTES
http://www.lallacuna.cat/
La Plana d?Ancosa es un territorio singular que abarca en poco más de un kilómetro cuadrado los restos de un convento cisterciense, con su pozo medieval, un roble monumental y una curiosa sima vertical. Antes de llegar la ruta visita también el castillo de Vilademàger y Puig Castellar, desde donde se disfruta de grandes panorámicas.
Salimos de la plaza porticada del pueblo por el portal d?en Garreta, una de las entradas a la antigua villa mediev... La Plana d’Ancosa
La Plana d’Ancosa es un territorio singular que abarca en poco más de un kilómetro cuadrado los restos de un convento cisterciense, con su pozo medieval, un roble monumental y una curiosa sima vertical. Antes de llegar la ruta visita también el castillo de Vilademàger y Puig Castellar, desde donde se disfruta de grandes panorámicas.
Salimos de la plaza porticada del pueblo por el portal d’en Garreta, una de las entradas a la antigua villa medieval amurallada. Vamos en dirección al cementerio, desde donde sale la pista que, con algunos tramos de fuerte pendiente, sube al castillo de Vilademàger, que actualmente conserva restos de torres semicirculares y del recinto amurallado.
En el interior de lo que era el recinto amurallado se conserva magníficamente la iglesia de Sant Pere de Vilademàger. En una de las bóvedas de la iglesia se conservan unas pinturas murales fechadas a inicios del siglo XI. En el interior también se conserva una pila bautismal de características románicas.
Continuamos la ruta hasta el collado entre las sierras de Rocamur y La Llacuna. Cresteamos toda la Serra d’Ancosa hasta encontrar la carretera que sube de Sant Martí Sarroca. Durante el trayecto podemos ver ocasionalmente el mar más allá de las cordilleras que encierran la cabecera del Foix y que nos separan del llano del Alt Penedès.
En el Collet de la Serra nos desviamos para iniciar la ascensión a Puig Castellar. Paradójicamente debemos perder un poco de altura hasta Cal Manyo para ir a buscar la pista que nos sube a la cima. Antes de empezar a perder altura, justo en una clara bifurcación se encuentran, sólo a medio kilómetro de distancia, los restos del poblado ibérico de Puig Castellar, que se pueden visitar opcionalmente; incluso empujando la bici se puede subir a la cima por el sendero, ya que no hay más de cincuenta metros de desnivel.
La relativa altura de la cima de Puig Castellar, 944 m, uno de los más altos de la comarca de l’Anoia, nos permite disfrutar de buenas panorámicas de las sierras cercanas pertenecientes al Sistema Prelitoral Central: Montmell, Ordal, Garraf, Montserrat, Miralles, Comaverd o Prades. En días claros, a pesar de la distancia, también se ven cercanas las cordilleras del Prepirineo que cierran la Depresión Central: Port del Compte, Cadí, Pedraforca, Ensija, Moixeró o Puigmal.
Aunque desde la cima podemos recortar la ruta, nuestro segundo objetivo es la Plana d’Ancosa, que vale la pena visitar. Para llegar deshacemos el camino y alargamos la ruta por la cresta de la Serra dels Esgavellats hasta el collado de la Rimbalda. Todo el trayecto es pedregoso pero muy interesante. Esta llanura o penillanura rocosa, cerrada por todos lados excepto por el paso por donde fluye el torrente de la Llançana nos ofrece un paisaje singular que esconde lugares interesantes que la ruta visita: el antiguo convento d’Ancosa, con su pozo medieval, el roble monumental y la sima.
El antiguo Convent d’Ancosa, del que sólo quedan unos restos al norte de la casa d’Ancosa, fue cedido el 1155 a los monjes cistercienses de Valldaura por los condes de Barcelona para que establecieran un monasterio. Probablemente las carencias de agua y la pobreza del terreno empujaron a los monjes a instalarse el 1158 en Santes Creus. El lugar quedó como una granja propiedad de Santes Creus. Cercana a la granja hay también una joya arquitectónica, el pozo medieval d’Ancosa, que tiene una profundidad de 9 m por 3 m de diámetro y una magnífica bóveda que lo cubre.
Antes de llegar al lugar d’Ancosa pasaremos por la sima d’Ancosa, una cavidad natural de origen hidráulico con entrada vertical y una profundidad de más de 30 metros. Y un poco más allá encontramos el roble d’Ancosa, catalogado como árbol monumental con una copa enorme y con 437 cm de perímetro de tronco.
Desde la casa d’Ancosa la pista principal sale del llano por el collado de Corral, desde donde, dando un rodeo por la pista de la izquierda, llegamos a La Llacuna.
Diciembre de 2015
CENTROS DE INTERÉS
Sant Pere de Màger. Castell de Màger. Poblado Ibérico de Puig Castellar. Convento, Pozo Medieval, Roble y Sima d’Ancosa.
ALOJAMIENTOS / RESTAURANTES
http://www.lallacuna.cat/